Para abastecer un centro turístico como el de Mallorca se necesitan empresas de logística fiables. Una de ellas es Mallorca Logispeed S.L., filial de la compañía de transportes alemana Schumacher  —con una directora mallorquina a la cabeza y una clara apuesta por los camiones de la estrella.

Más de quince millones de visitantes anuales, 300.000 plazas hoteleras y 45 millones de pernoctaciones: el turismo es y seguirá siendo la actividad económica más importante de Mallorca, representando el 75 % del PIB (Producto Interior Bruto) de la isla. El principal motor de la economía insular trabaja de la mano de otros sectores: la construcción y la agricultura, por ejemplo, proporcionan la infraestructura, los hoteles y los alimentos que necesitan los turistas. 

Con más de tres millones al año, los turistas alemanes han sido durante muchos años el mayor grupo de viajeros que visitan Mallorca. La isla atrae asimismo a numerosos visitantes de Gran Bretaña, Escandinavia y los países del Benelux. Muchos de ellos son huéspedes habituales, otros han decidido hacer de Mallorca su segunda o, incluso, su primera residencia. Algunos de los residentes extranjeros son jubilados que optaron por vivir en la isla por su clima mediterráneo. 

Otro factor que determina la economía insular son las personas de altos recursos económicos que sucumbieron a los encantos de Mallorca y están dispuestas a invertir y gastar dinero en la isla. Esto da lugar a flujos transfronterizos de mercancías que deben ser bien organizados. 

Una empresa que se ha hecho un nombre en este campo en los últimos cuatro años es Mallorca Logispeed S.L., una filial de la firma de transportes Schumacher, con sede en la ciudad alemana de Würselen, cerca de Aquisgrán. 

A pesar de tener una matriz alemana, Luz Cloquell, directora gerente de Mallorca Logispeed, subraya que su empresa es puramente mallorquina: «Cualquiera que quiera ofrecer transporte y logística en Mallorca debe conocer bien la identidad de la isla y de sus habitantes. No basta con ser un proveedor de logística moderno, típicamente alemán, con procesos claros, un alto nivel de servicio y una gran fiabilidad».

Cuando habla de identidad, Luz Cloquell se refiere, en primer lugar, a la lengua: en Mallorca se habla mallorquín, un dialecto del catalán. También destaca los contactos y las relaciones de larga duración requeridos para montar una empresa. Y, por supuesto, el conocimiento de las tradiciones y costumbres: «Solo aquellos que entienden estas señas de identidad de la isla pueden trascender el estatus de huésped y lograr el éxito», enfatiza Luz Cloquell. Actualmente, la directora y su equipo están exportando a Mallorca la vasta experiencia de la alemana Schumacher en la logística de alimentos frescos para poder así crecer en ese segmento. 

Una buena base para la aplicación de esta estrategia constituye la constante demanda de servicios de transporte y logística, tanto en el sector turístico de empresa a consumidor como en el de empresa a empresa: Mallorca Logispeed importa motocicletas, coches y embarcaciones de recreo para los veraneantes y los residentes extranjeros. Además, realiza mudanzas completas o transporta materiales de construcción para aquellos que se establecen en la isla. 

A esto se le suman los típicos productos alemanes, de los que más de uno no quiere prescindir durante las vacaciones: En temporada alta, los camiones con el logo de Mallorca Logispeed transportan a la isla la cerveza alemana tan codiciada por los turistas que acuden en masa a famosas cervecerías de la talla, por ejemplo, del «Bierkönig» (Rey de la cerveza). 

Sin embargo, con transportes en una sola dirección por lo general no es posible crear un negocio sostenible. De hecho, el desequilibrio entre la importación y la exportación fue uno de los principales retos de la empresa en sus comienzos. En los últimos años, sin embargo, la compañía ha logrado establecer múltiples relaciones con transportistas de la isla y del norte de España para realizar rentables transportes de ida y vuelta. Los camiones de Schumacher que llegan regularmente al puerto de Palma por encargo de Mallorca Logispeed regresan a Aquisgrán a menudo cargados de mercancía. En la actualidad, por ejemplo, un mayorista mallorquín en el área de diseño y decoración está equipando en Alemania varios hoteles nuevos, y utiliza la capacidad de almacenamiento con la que cuenta Mallorca Logispeed en la capital de la isla.

Para optimizar la ocupación de los camiones en la logística inversa, Mallorca Logispeed aprovecha la temporada de cosecha para transportar naranjas a Alemania. Por otro lado, apuesta asimismo por la gran comunidad de clientes de altos recursos que tienen su segunda residencia en Mallorca y desean transportar sus coches, motos o bicicletas de un sitio a otro.

Luz Cloquell y sus dos hijas también viajan entre las Islas Baleares y Aquisgrán —y lo hacen por amor. «Lo que al principio era una obligación, es ahora un estilo de vida inspirador para nosotras. Simplemente combinamos lo mejor de ambos mundos». 

Para esta emprendedora de 36 años, nada es imposible: una actitud de vida que siempre la ha caracterizado. Después de que sus abuelos emigraran de Mallorca a Argentina tras la Segunda Guerra Mundial, Cloquell regresó a la isla a mediados de los años noventa siendo una joven madre. Quería escapar de la crisis económica argentina y construir su futuro. «Mis padres también regresaron a la isla de sus antepasados, y aún teníamos parientes en la isla. Tuvimos que empezar de cero».

Después de formarse en administración y gestión de empresas con un enfoque en el comercio internacional, Luz Cloquell dio sus primeros pasos en el sector inmobiliario. Hace algunos años, la joven conoció a Josef Schumacher jr., el director de la empresa alemana de transportes del mismo nombre. Desde entonces forman pareja, y Luz Cloquell continúa con su plan de convertir a Mallorca Logispeed en una empresa de logística con virtudes empresariales alemanas y, sin embargo, firmemente anclada en Mallorca.

Para Cloquell, la fiabilidad alemana también debe estar presente en su flota de camiones. Los vehículos forman parte de la flota de 200 camiones de Schumacher y son casi sin excepción de Mercedes-Benz. La fiabilidad, la eficiencia y la seguridad, así como la gran aceptación por parte de los conductores, son los principales argumentos a favor de los camiones de la estrella, asevera. Los impecables camiones lucen el logo de Mallorca Logispeed con la «AC» invertida, un símbolo de la firme conexión entre Mallorca y Aquisgrán. 

«Siempre recibimos comentarios positivos de los clientes por nuestra fiabilidad», dice Luz Cloquell. «Este es un factor de éxito muy decisivo que encuentra su expresión en la actitud de nuestros empleados, en la precisión de nuestros procesos y, por último, pero no menos importante, en los camiones, que son fiables y de diseño atractivo».

Hay una frase muy controvertida que se refiere a Mallorca como el estado federado número 17 de Alemania. Esta osada afirmación, que, como toda exageración, tan vanamente ignora la propia identidad de la isla, no deja de tener una pizca de verdad. A través de su estrecha conexión con Schumacher, Mallorca Logispeed aprovecha las intensas relaciones de la economía de la isla con Alemania. Y combina las virtudes de la mentalidad mallorquina y alemana en un paquete completo que los clientes, independientemente de su origen, saben apreciar.